Las multiplicidades y sus ramificaciones en el orbe son ilimitadas. Entre infinitas variables apreciables en el péndulo de espiritualización y desespiritualización de la población del mundo en sus períodos junto al desencadenamiento de purgas. Sólo tomemos un punto: la comunicación junto a la filosofía indómita de significados, el número de idiomas que se tienen como referencia abarca la cifra de 6.500, aunque los colectivos o tribus idiomáticas complejizan la percepción exacta.
Las multiplicidades y sus ramificaciones en el orbe son ilimitadas. Entre infinitas variables apreciables en el péndulo de espiritualización y desespiritualización de la población del mundo en sus períodos junto al desencadenamiento de purgas. Sólo tomemos un punto: la comunicación junto a la filosofía indómita de significados, el número de idiomas que se tienen como referencia abarca la cifra de 6.500, aunque los colectivos o tribus idiomáticas complejizan la percepción exacta. Mencionemos algunos. El asturiano o bable: es el término glotónimo utilizado para referirse a la lengua del dominio lingüístico asturleonés en el Principado de Asturias (España); el ávaro que se habla en Rusia, Azerbaiyán, Kazajstán y Turquía; el aimara interactuado en Perú, Bolivia y en el norte de Chile; el azerí usado en Azerbaiyán, oeste de Irán y partes de Georgia, Irak, Daguestán y Turquía; y así podemos llegar a 300 idiomas principalísimos. Otro ítem son las poblaciones y sus culturas, sus migraciones e inmigraciones, las razas humanas con sus valores y comprensiones socioculturales, aculturalizadas, culturizadas, transculturizadas, interculturizadas e hibridizadas, como diría García Canclini. Otro elemento: los segmentos ideológicos, partidocráticos, grupúsculos, organizacionales, clubes de intereses, conglomerados que inhalan y exhalan dibujándose en un estallido de archipiélagos con sus virtudes y circos insospechables. Además, el cristianismo, islamismo, budismo, hinduismo, sijismo, judaísmo, rastafarianismo… También las extremas diferencias materiales de la metra global. Unido a las astronomías psíquicas y emotivas individuales que lleva en su mochila cada entidad humana. El unificador Bolívar, después de perder y liberar repúblicas, recorrer 6.500 kilómetros de emancipación, 10 veces más que Aníbal, tres veces más que Napoleón, dos más que Alejandro Magno, fue desterrado y siete días antes de expirar, dijo desde Santa Marta, Colombia: "Si mi muerte contribuye para que cesen los partidos y se consolide la unión, yo bajaré tranquilo al sepulcro". ¿El humanismo unirá a los humanos?, habría que cortar tela en mil cosmos, hay que insistir y conquistarla, así sea en mil siglos o pronto, antes de que los paradigmas nos evaporen.
Profesor de la UCV y de la Unimet
